martes, 10 de diciembre de 2013

Democracia

Un dia como hoy, hace 30 años, esperabamos en el patio de la casa de mis padres. El patio estaba cercado con alambre aun, y se podia ver el horizonte despues, no habia barrios, casas, no habia nada. El barrio y el asfalto terminaban en la esquina, en la manzana donde esta la casa solo estaba eso, la casa, la de mis padres y pegadita, la de mi abuela. Los patios se compartian, hasta que la familia empezo a quebrarse y empezaron a existir las medianeras. Pero esa es otra historia. Me acuerdo de estar sentanda en un banquito, con mis cinco añitos veia la emocion pero no la entendia, mis padres y mis abuelos estaban expectantes, escuchando la radio, una Noblex colorada, que estaba apoyada en uno de los peldaños de la escalera que usaba mi padre para construir. Nunca se me va a borrar la imagen de la radio, el olor de la tarde de verano, las lagrimas de mi madre, la esperanza de todos... Esperanza cumplida, ellos tenian la esperanza de que en ese momento, con ese acto, empezaba un mundo nuevo, y asi fue, con altas y bajas, con mucho sufrimiento, con pobreza, con dinero, pero siempre tirando para el mismo lado, todos los argentinos apostando por elegir nuestro propio destino, que por malo que parezca, es el nuestro. Se me mezclan los recuerdos, entre el dia de la votacion y el de la asuncion, en mi casa todo era fiesta, debe ser por eso que para mi los dias de votacion son dias de fiesta. Creci en democracia, casi no me quedan recuerdos de la dictadura, muy pocos. Mi vida transcurrio en democracia, y doy gracias por eso y doy gracias por no darlo por sentado, no haberme acostumbrado tanto como para no darle importancia. Algo debe haber quedado de esos dias que se me grabo en el alma, y hace que cada vez que tengo el honor de ir a votar, vaya con el corazon en vilo, latiendo fuerte en el pecho, feliz.