Tenia 20 años y todavia existian los walkman. Amaba salir a caminar, por el bosque en La Plata, esa mezcla de ciudad grande que se perdia de repente entre el sonido de los pajaros y el murmurar de la brisa en tre los arboles. El follaje espeso, miles de flores de todos colores, la tierra siempre humeda... Escuchaba Etiqueta Negra de redondos, y cada vez que lo escucho ahora se me hace ese nudo en el pecho, esa mezcla de melancolia y de alegria por haberlo vivido. Recuerdo esa sensacion fantastica de tener el mundo a tus pies, de que todo estaba por delante, tanta libertad , eso siempre me genero la Plata, la sensacion de estar cerca de todo el mundo, esa apertura de cabeza, ese olor, esa brisa, las calles con mil direcciones, caminar mucho, no se porque uno camina tanto en la Plata, no se si es la pobreza de los estudiantes, o que con las diagonales parece que queda todo cerca.
Los museos, que barbaro, todas las tardes tenes algo para hacer aunque no tengas un centavo, siempre hay alguna muestra. Pude ver una exposicion de Picasso, es muy loco, para alguien como yo que crecio entre libros de el museo de Louvre, y cuanto pintor se te ocurra, poder llegar a ver un Picasso de verdad, es una experiencia casi visceral, no me lo voy a olvidar mas. Y los palos borrachos, que belleza, la muestra fue en el teatro y alrededor esta lleno de palos borrachos. Y quisiera seguir escribiendo pero tengo muchisimo trabajo y veo como sigo despues.
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