lunes, 27 de mayo de 2013

Adopcion

Hace unos dias un hombre me conto una historia. Un hombre de unos 50 años, me conto que despues de muchio esperar, los llamaron de Mendoza, y cuando llegaron, la fundacion adoptar los estaba esperando con una beba. Le pregunte cuanto tenia, 2 dias me dijo. Se me puso la piel de gallina. Tan chiquita. Se la llevaron, ahora viven felices los tres, 7 años despues. Antes de tenerlo a Ivan pensaba que nunca podria adoptar. Pensaba que si no podia tener hjos, o si no encontraba un padre, no tendria hijos, pensaba que no era lo mismo. Mi bebe me dio otra leccion. Desde que lo tengo conmigo, se que podria adoptar, que si no hubiera podido concebir lo habria hecho, que si no hubiera conocido a M, hubiera adoptado un bebe sola. Me enseño que este amor no depende de la sangre, este amor se va forjando todos los dias. Yo no lo quiero porque lleve mi sangre, lo quiero porque es mi hijo, y si mañana me dijeran que se equivocaron en el hospital, y me dieron otro bebe, nadie me sacaria a mi bebe, me iria a China o al Congo Belga, esas locuras que hacen en las peliculas, pero nada me alejaria de el.

No hay comentarios:

Publicar un comentario